martes, 4 de agosto de 2009

Honestamente.

Es como si nada hubiera ocurrido. Quizás pensar en la estúpida idea de que volverás, me ayude a mantenerme en pie. Yo rechazo tu realidad y la sustituyo por la mía. Sin ti, sin aire. Dulces noches de verano, estrellas fugaces, nuevos romances que te ayudan a estar sano. Para mi, eso ya se perdió. Perdí las ultimas fuerzas, incluso la intuición que siempre tuve. Quiero que desaparezcas de mi vida, al igual que tan rápidamente desaparecí yo de la tuya.